Mar Carrillo García ISBN : 8409578972 425 páginas
Hasta hace bien poco, y yo creo que más por olvido que por ignorancia, veníamos creyendo que el llamado “Realismo mágico” era cosa que había desvelado al mundo el talento de Gabriel García Márquez. No quito ni pongo rey, faltaría más que a estas alturas viniera un ignorante de tomo y lomo a quitarle mérito al gran autor colombiano. Y esto viene o vendrá a cuento de la publicación por la escritora Mar Carrillo de la primera entrega de su obra “Hijas de Ilión”.
Este año es el centenario del fallecimiento de uno de los posiblemente más grandes escritores de la historia que, sin embargo, no deseó nunca que su obra fuera conocida. Con ese dato y conociendo la temática existencialista de la misma (en sentido amplio), ya os podéis imaginar que estamos hablando de Franz Kafka.
Comienza Emilio Lledó su obra «Identidad y amistad: palabras para un mundo posible» afirmando que: “Los orígenes de la cultura griega son siempre sorprendentes. Una de esas sorpresas, que nos invita a dialogar con ella, es su presencia y, en esa presencia, su actualidad…
«¿Quién mató al caballo (o al caballero)?»
Una composición fotográfica inspirada en la novela La tabla de Flandes, de Arturo Pérez-Reverte
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Espejo e ideal político
Resulta particularme interesante este cometrio. En él -digamos- se dan la vuelta y/o se muentran los efectos secundarios de los ideales políticos de Don Quijote.
De los conflictos, la guerra y las armas,
En un momento don Quijote media entre dos pueblos que se disponen a combatir por causa de los rebuznos de sus regidores…
Don Quijote envistiendo ovejas
IRONÍA Y CRUELDAD EN EL QUIJOTE
Sinopsis: Don Quijote es muchas cosas más y más graves tanto en el terreno de la ficción personal (literaria, claro) como en la material (aspecto adjetivo también literario). Don Quijote es un mito nacional; un ideal irónico, el origen de un adjetivo, el último héroe y el primer antihéroe.
La Musa de Homero
¿OLVIDAR EL QUIJOTE?
En un magistral ensayo titulado “Instrucciones para olvidar El Quijote” el filósofo Fernando Savater aprovecha para trazarnos la figura poliédrica, y aun contradictoria o bipolar, del Ingenioso Hidalgo.
En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor».
Ésta que antecede debe ser la frase más conocida de la Literatura universal. Vamos a seguir con ella y con la -digamos- cosificación del Ingenioso Hidalgo.
De hecho, y si se nos permite, vamos a establecer una sistemática propia que nos permita analizar, como dice el filósofo, si hay que olvidar el Quijote y, en su caso, cuál de ellos, cuál de sus muchas manifestaciones deberíamos cubrir con un manto sin fisura.
De entrada, se nos aparece un aspecto evidente: Don Quijote no es solamente un personaje de ficción literaria. Si así lo fuera exclusivamente no estaría tan fuera de contexto como está (psicología del personaje) o, desde otro punto de vista, se saldría de la novela, de un texto que no daría de sí ni aun en la talla XXL. Realmente no se conciben el uno sin la otra, por más que ésta pertenezca a la realidad del siglo XVI y el Hidalgo desentone absolutamente de ese contexto, como de hecho ocurre.
Don Quijote es muchas cosas más y más graves tanto en el terreno de la ficción personal (literaria, claro) como en la material (aspecto adjetivo también literario). Don Quijote es un mito nacional; un ideal irónico, el origen de un adjetivo, el último héroe y el primer antihéroe. Repito adrede para, incluso para que yo mismo reflexione sobre la enorme carga de profundidad que conllevan esas afirmaciones y otras muchas que cabrían en el con-texto…
Siguiendo a Savater, es posible que Cervantes lo concibiera como algo más jocoso (ya veremos que ése no es precisamente uno de sus rasgos distintivos). Pero ¿y las características antes reseñadas? ¿No nos conducen a un prototipo, como todo, definido más adelante en la Historia y que es la sustancia de toda narración (realidad/ficción, A. Muñoz Molina), o incluso la nada… Pero no, Cervantes convierte a su hidalgo en el arquetipo de la fe ciega: no se puede esperar otra cosa de un tipo enajenado, persona en la ficción y cosa en el mismo ámbito siempre imbuido en el conflicto persona/cosa, puesto que reviste la forma de aquélla, pero su finalidad en la vida -digamos- no es compatible. Como antes se ha dicho, y nos hemos quedados cortos. Don Quijote es muchas cosas más y más graves tanto en el terreno de la ficción personal (literaria, claro) como en la material (aspecto adjetivo también literario). Don Quijote es un mito nacional; un ideal irónico, el origen de un adjetivo, el último héroe y el primer antihéroe; siendo todo esto manifestaciones del actuar del personaje, es la vertiente dinámica, que, en realidad no existe más que en insondable arcano de la mente de don Quijote. Es también un ser anhelante de reconocimientos (Savater desfaciendo entuertos y salvando damas presas del pánico que les infunde el estrafalario personaje que de otra cosa.).
Sus empeños frente a la hostil realidad, él cree coronados por el éxito. Pero como dice Savater don Quijote está vencido de antemano…
(Continuará, prometo ser breve)
Aniceto Valverde
Decir que el mundo ha cambiado radicalmente es una estupidez en boca de quien lo dice, a mi juicio. Y lo ha sido en tal grado que ha girado ciento ochenta grados, como en el famoso relato «El bosque» de Ítalo Calvino en el que la pérfida reina no podía matar al rey (para poner a otro, su cuñado) porque cada vez que se le iba a presentar la oportunidad, su tropa pasaba a nivel del suelo como las del rey marchaban sobre las tupidas ramas de un extraño bosque, seguramente, encantado. Y favorable al buen rey.
Tú serás
Tú serás la risa en los días de verano,
Tú serás mi café por la mañanas,
Tú serás la manta de los días de frío,
Tú serás mi paraguas cuando llueve.
En definitiva, tú eres lo que me hace feliz.
Mar Carrillo
(De «imbricaciones textuales»)
LA MUSA DE HOMERO
DE LO ANALÓGICO Y DE LO DIGITAL
En el lenguaje al uso actual se viene empleando la expresión analógico con relación o queriendo significar que algo tiene esa cualidad cuando pertenece a otro tiempo anterior y/o su técnica está ya obsoleta.
En contraposición, algo es digital cuando es propio de nuestro tiempo y suele ser accionado por medios informáticos.
Estas proposiciones siempre me han llamado la atención, por no decir que me chirrían. En Derecho la analogía es un principio de interpretación del mismo. Se sustenta en la semejanza que debe existir entre el caso previsto, y el no previsto, evitando así la diferencia radical entre ambos. O sea que ambos supuestos se parecen de tal manera que se les puede, al menos en parte, aplicar la misma regla de Derecho. Son análogos.
Creo que este mismo razonamiento se puede aplicar a las cosas materiales. Se puede establecer una relación de analogía cuando hay semejanza entre ambos bienes.
Ya hemos dicho que lo digital parece oponerse a lo analógico. Pero ¿qué fue antes, el huevo o la gallina?. Parece que, mirando el tema como lo estamos haciendo, primero fue lo antiguo a lo que por analogía es similar lo moderno o contemporáneo. Dicho de otro modo, la relación de semejanzas parte de lo anterior y da base o fundamento a lo actual.
A mi modesto juicio, cuando hablamos, por ejemplo, de fotografía analógica —a diferencia de la digital— estamos cometiendo un error de perspectiva. Perdone Ud., pero la que se parece a la antigua es la digital; luego, en puridad, ésta debería considerarse o calificarse de analógica y viceversa: la que se basa en la ya no usada, es el precedente sine qua non de la que calificamos de digital.
El Diccionario de la RAE viene a confirmarnos en esta idea ya que define “Analógico” como aquello:
«2. adj. Dicho de un aparato o de un sistema: Que presenta información, especialmente una medida,
mediante una magnitud física continua proporcional al valor de dicha información. Termómetro analógico.
- adj.Que se realiza o transmite por medios analógicos. Señal, telev-isión analógica.
- adj.Ling. Perteneciente o relativo a la analogía.».
Por último, y que cada cual saque sus conclusiones se dice que:
«Lo analógico es aquello basado en la analogía: un vínculo de semejanza entre elementos distintos. Este adjetivo, derivado del vocablo griego analogikós, suele usarse para hacer referencia a un tipo de sistema o de dispositivo.
Los aparatos analógicos, en este marco, presentan información a través de una magnitud física continua que es proporcional al valor de la propia información. Por lo general lo analógico se opone a lo digital, que trabaja con información creada, almacenada o transportada con una combinación de bits (una unidad de medida vinculada a la cantidad de información, que equivale a la elección entre dos alternativas con el mismo grado de probabilidad).» [https://definicion.de/analogico/]
Lo único que uno termina sacar en claro es que quién sabe con precisión aquello de lo que se predica como analógico. Y que, asimismo, lo digital, hace referencia a los elementos que son creados o transportados en o a través de medios informáticos o telemáticos.
Aniceto Valverde
Dedicado especialmente a Carlos Dosel, presidente de la Asociación de Escritores de Cartagena, por lo que sin duda ha debido ser una usurpación achacable a un robot malicioso de los que pululan por Internet el asunto se solucionará por la vía técnica y esperemos que no jurídica.
El valor de las palabras.
La imagen que ilustra este modesto texto es un ejemplo de lo que se denomina Captcha. Se suele emplear para verificar que es una persona y no un robot el que intenta acceder a algún contenido web, recuperación de contraseñas, etc. En definitiva, alguien que usa palabras y no es un algoritmo mecánico-informático.
En este apunte se intenta analizar el papel de la Filosofía en la gobernanza de los Estados. Se inicia con las tesis de Max Weber para acabar con las de Platón expresadas en su obra «La República»
«Canta musa la cólera de Aquiles. Y no existía musa alguna que cantase, ni Aquiles alguno que pudiese encolerizarse…» (Emilio Lledó)
Las palabras son la sustancia de la que se nutre la inteligencia y a ellas, a la filosofía del «logos» va destinada esta Sección en la medida en que nuestros conocimientos alcance.
Con la desaparición de Mijail Gorbachov, a mi juicio, cae la última esperanza de la -realmente- universalización de nuestro mundo.
Francisco Jarauta es un filósofo murciano, profesor emérito de su Universidad. En este vídeo nos narra a su manera el relato de Frank Kafka «El artista del Circo», una muestra más del existencialismo del autor checo o praguense y de la exquisita sensibilidad del filósofo.
Por Ginés-Luis y Aniceto Valverde Conesa
(Por favor, tégase en cuenta que el audio tarda unos segundos en cargarse. Gracias)