HIJAS DE ILIÓN

Mar Carrillo García

ISBN : 8409578972

425 páginas

Hasta hace bien poco, y yo creo que más por olvido que por ignorancia, veníamos creyendo que el llamado “Realismo mágico” era cosa que había desvelado al mundo el talento de Gabriel García Márquez. No quito ni pongo rey, faltaría más que a estas alturas viniera un ignorante de tomo y lomo a quitarle mérito al gran autor colombiano. Y esto viene o vendrá a cuento de la publicación por la escritora Mar Carrillo de la primera entrega de su obra “Hijas de Ilión”.

Quizás pueda entenderse -retomando el hilo argumental inicial de  esta breve y modesta nota- lo que quiero decir distinguiendo, casi desgarrando la sustancia de la forma. Y así, comienza la Ilíada.

“Canta, Musa, la cólera de Aquiles”, y, añade el filósofo Emilio Lledó, no existía Musa alguna que contase ni Aquiles alguno que pudiera encolerizarse, puesto que parece ser que los dioses pusieron esta o este símil de crónica de muerte anunciada en las palabras de un hombre ciego y prodigioso llamado Homero que es el que cantaba -con el ritmo pausado del hexámetro- lo que la reina de las musas griegas (Calíope, aun no citada expresamente por Homero) le dictaba al oído: la crónica mágica que, en otro caso, hubiera sido ininteligible para los mortales. Y, por antonomasia la Guerra de Troya como conjunto de diversas narraciones en las que se cuentan como esferas o círculos concéntricos los papeles que desempeñan dioses, semidioses, héroes, reyes, mortales…  teniendo en cuenta la variabilidad de roles ordenada, en su caso, por un dios o diosa en relación hasta a un simple mortal que bien puede verse encumbrado a héroe.

Pero qué pasa con los humanos: ¿No tienen voluntad propia? Evidentemente dominados por los dioses, ellos -por poner un ejemplo- comenzaron la guerra… Y aquí es donde viene el difícil papel de la mujer en la Grecia clásica.

La escritora Mar Carrillo García se ha empeñado en desentrañar ese rol o roles de la mujer griega, esa esfera que engarza con la de los hombres por el eslabón -fundamentalmente- de la sumisión a éstos, salvando puntos de quiebra (uno en especial que citaré luego.)

Mar viene encarando esta ardua tarea unos cuantos años ya desde las páginas de la revista digital “Zenda” (por ejemplo su última entrega puede hallarse en: https://www.zendalibros.com/megara/) en su sección Mito con M de Mujer… Por eso, porque es mito, tiene poesía y mundo propio. Carrillo nos desvela la concepción del universo que tenían los griegos y lo hace poco a poco puesto que no  es pequeña (todos lo sabemos) la -digamos también-  imaginería y el entramado de la realidad en la ficción o viceversa.

Yo no voy a hablar concreta o específicamente de  “Hijas de Ilión”. Voces más autorizadas lo han hecho. Simplemente subrayar lo que puse al principio de esta modesta nota: fondo  y forma. Y diré que, seguramente no sólo en la trama argumental de esta obra, sino en general en los trabajos de Mar Carrillo, la habilidad (mágica) de la mujer es la que la salva y aun le confiere un poder (no me gusta el término empoderamiento) que, en principio, no le correspondía en la Cosmogonía de la Grecia clásica.

Por último diré que creo que la autora emplea en esta ocasión un lenguaje quizás menos barroco, más liviano que el de “Imbricaciones textuales” (su ópera prima) aunque éste sea un poemario, y no es lo mismo. Uno, personalmente, agradece ver claro el fondo a través de este tipo de forma. Y aún agradece más el placer que me ha ocasionado la lectura de “Hijas de Ilión” de Mar Carrillo.

Aniceto Valverde